Volver arriba

El dramaturgo mexicano Hugo Abraham Wirth,  autor de La Fe de los Cerdos recurre   a una actividad ilícita como el narcotráfico  para atrapar la atención del espectador y logra desde el primer acto, sumergirlo en el mundo  violento de una familia dedicada  al narcomenudeo. 
La matanza de puercos y la comercialización de su carne  es solo un pretexto para cubrir apariencias,  porque su verdadero “oficio” es rellenar  los cerdos  con paquetes de droga.
 
Vísceras  y bofes son extraídos del interior del  animal por los protagonistas,  aunque quizá  el simbolismo de  lo que hay en el interior de estos animales,   es  la serie de delitos que encierra la historia, como el incesto,  el tráfico de niños,  asesinatos, violaciones, maltrato físico, psicológico, pérdida de valores y degradación moral.
 
En la obra  actúan cinco personajes: Bernardo interpretado por Andrés Tirado,  un  asesino  sin escrúpulos;  Catalina (Dulce Guzmán),  casada,    pero que sostiene relaciones sexuales con su hermano Fabián;  Tomy ,  hermano de ambos que sufre retraso mental;  Fabián,  personificado por Giovani Armenta y  Analidia Santana, la elevadorista, compañera de trabajo de Fabián  y pieza clave que contribuye a dar un giro dramático al final de la obra.
El autor dota a cada  personaje de una alta dosis de maldad y perversidad humana ; quizá el menos  perverso  es Fabián,  que además de sufrir la infidelidad de Catalina,  está contagiado de “ladillas” aunque éstas, más que revelar  la putrefacción del órgano de Fabián,  es solo un pretexto del autor para exhibir el grado de pudrición de la sociedad.
 
La obra plantea una reflexión sobre las ataduras que la sociedad impone al individuo; se trata de una propuesta valiente, con personajes que se pudieran encontrar cualquier día por la calle.
 
El marco escénico permite que el público se convierta en parte de la historia, encarnando el papel de la sociedad, que asiste como espectador privilegiado  de la violencia, la corrupción y la decadencia de las estructuras sociales.
 
Un buena actuación de un personaje con discapacidad intelectual y física fue la que logró Samuel Arwing, éste ser enfermo se ve imbuido

Éste artículo fue publicado en Prensa. .

Lo destacado

Inklusion
Loading